El que me conoce sabe que soy sincero, un poco extrovertido y hasta visceral, cosa que a much@s no les gusta y quizá no me lo perdonen, pero que se fastidien.

En este blog vemos desde la posición que pueda tener un joven corriente, entre otras cosas, la actualidad que le rodea en todos los ámbitos de la vida y de las inquietudes surgidas a partir de ellas.

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jueves, 13 de enero de 2011

Que fue de...

A mí como al resto de la sociedad supongo que nos ha sobrecogido en los últimos meses escuchar historias inconcebibles y testimonios desgarradores que hacen reflexionar sobre el origen de muchos de nosotros. Casos de adopciones irregulares a la carta donde las distintas instituciones (incluida nuestra Santa Iglesia) se encargaban de darle el toque de “legalidad” preciso.
Dichos “niños robados” ya superan los cuarenta años y continúan con su vida sin conocer quiénes son ni de dónde vienen, intentando conocer su verdadero origen encontrándose siempre con la misma respuesta: el silencio. Están aglutinados en la Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares (Anadir) y las víctimas aumentan por días y forman una gran familia.
En nuestro país se ha robado y adoptado de aquella manera a niños sistemáticamente empezando desde ni sabemos cuándo hasta más allá del adiós a Don Francisco.
Durante décadas los robos se destinaban para familias pudientes sin descendencia pero finalmente estaban orientados al mero negocio del que se lucraban desde los mismos médicos (Dr. Vila sigue ejerciendo por ejemplo) hasta matronas, enfermeras, monjas y demás personal estableciendo una estructura bien definida y todo ello amparado bajo un engaño que ni el Estado ni las autoridades pertinentes quieren ni pretenden desenmascarar.
La Iglesia, como no, estaba presente en cada trámite incluso castigando a las parturientas con técnicas nazis, ya que después de parir a muchas las mantenían durante años limpiando los suelos de los hospitales para que pagaran su deuda por haber sido tan bien atendidas... Aún así, la Santa Sede es la que tiene todos los registros originales de padres, defunciones, nacimientos… y es que para ellos los más de 300.000 niños robados son casos aislados.
Garzón, la única persona que ha intentado investigar el origen de numerosos casos tanto de fosas comunes, represaliados y niños robados (todo se interrelaciona) no cuenta con la aprobación de la parte conservadora de la política ni de la justicia, por lo que ha sido llevado al banquillo por ello.
…y es que en este país todo funciona así.
Ánimo a esa gran familia.